viernes, 6 de diciembre de 2013

Tiempo de definiciones

Efraín Rincón Marroquín (@EfrainRincon17)

El 8 de diciembre no se termina el país; seguiremos viviendo con nuestras esperanzas e infortunios, indistintamente de los resultados de la contienda electoral. Sin embargo, para los que creemos que la solución de la crisis nacional es democrática e institucional, es una nueva oportunidad para apostar al cambio y consolidar la lucha por un mejor destino para Venezuela. Es el momento para expresar nuestro categórico rechazo a un gobierno incapaz que impide con todas sus fuerzas que la luz del progreso nos alumbre a todos por igual. Es el tiempo de las definiciones. Votamos convencidos que la victoria de la Unidad Democrática es el inicio de las cosas buenas que desde hace tiempo esperamos con legítimo derecho; o, por el contrario, nos abstenemos porque creemos que no existe salida y le terminamos de entregar el país a un grupito de enchufados que han utilizado el poder para destruir las riquezas y oportunidades de los venezolanos. Progreso o atraso; democracia o autoritarismo; verdad o mentira; unidad o división; futuro o pasado; ese es el gran dilema que con responsabilidad y conciencia debemos librar el próximo domingo.
Después de más de quince años de gobierno, con el control absoluto de los poderes públicos y con una montaña de dólares que nunca antes había ingresado al tesoro nacional, no hay tiempo para las excusas, ni mucho menos para la tesis del sabotaje y la guerra económica. Quienes han manejado a su real gana y entender este país, no tienen autoridad moral para responsabilizar a otros de sus errores e incapacidades. Ya basta de tanto engaño y manipulación. Es necesario que hagamos uso del voto, auténtica arma que nos ofrece la Constitución Nacional, para manifestar nuestra protesta y definir de una vez por todas cuál es la ruta que queremos para nuestra querida Venezuela y para nuestros hijos.
Por eso es necesario votar este 8 de diciembre. Asumamos con amor por Venezuela nuestro compromiso con el cambio y el progreso. Si salimos a votar masivamente el domingo, estaremos eligiendo alcaldes y alcaldesas demócratas, con comprobada capacidad para seguir luchando sin exclusión por el bienestar de sus conciudadanos; empeñados en enfrentar los obstáculos y mezquindades de un gobierno, cuyo principal interés es preservar el poder para profundizar el caos que nos afecta a todos, sin importar nuestra orientación política o situación socio-económica.
No te quedes en tu casa contemplando como otros deciden por ti. El domingo 8 de diciembre, levántate temprano y piensa que tú puedes ser un protagonista entre millones de valientes que luchan sin tregua por un mejor futuro para los venezolanos; después, dirígete a tu centro electoral y con tu voto aporta un granito de arena en la construcción de la llave que podrá abrir la puerta de un nuevo y mejor amanecer para la Venezuela que se resiste a seguir siendo pisoteada y abusada por una minoría que nos destruye como sociedad libre, democrática, justa y progresista. Que nada te detenga este 8 de diciembre. VOTA.

Publicado en Versión Final el 6-12-2013
Es necesario votar

Efraín Rincón Marroquín (@EfrainRincon17)

En momentos de dificultades e incertidumbre como los que estamos viviendo los venezolanos, es necesario fortalecer el espíritu democrático de la nación. Estar convencidos que hoy más que nunca la solución de esta crisis debe ser pacífica e institucional. Si antes, ejercer el derecho al voto era importante, hoy día es necesario por el bien de la República. Debemos ser responsables y comprometernos con el destino del país; no existen razones para mantenernos pasivos y desmotivados en esta hora menguada de la nación. Ir a votar el 8 de diciembre es lo menos que podemos hacer como ciudadanos que aspiramos vivir en una sociedad democrática, con oportunidades para todos, respeto y encaminada por los senderos del progreso.
Ya basta de mirar sólo hasta la punta de nuestras narices. Es necesario que tengamos una visión más amplia para entender la profundidad del hueco en el que hemos caído. Si todavía existen venezolanos que piensan que ya tocamos fondo, déjenme decirles que todo indica que la situación será mucho peor en los próximos meses. Este festín de Baltazar de las últimas semanas, propiciado por un gobierno irresponsable, tendrá su fin cuando los anaqueles estén totalmente vacíos y empecemos a padecer una escasez peor que la que hoy estamos sufriendo.
Este es un momento crucial para Venezuela. Quedarnos de brazos cruzados y abstenernos el 8 de diciembre, podríamos interpretarlo como un apoyo tácito al gobierno, porque nuestro silencio se convierte en cómplice de una gestión que está destruyendo la nación y las posibilidades de progreso al que tienen derecho nuestros jóvenes y todos los venezolanos. Se trata, apreciados lectores, del destino de Venezuela; esto es mucho más importante que elegir a alcaldes y concejales. Es la oportunidad que tenemos para expresar a través de nuestro voto lo que queremos como sociedad civilizada y democrática. Es el momento de las definiciones: apoyamos la continuidad porque estamos supremamente felices con la manera como se está gobernando el país, en consecuencia dejamos de votar; o, por el contrario, expresamos con contundencia nuestro rechazo a este caos y consolidamos con nuestro voto la señal de cambio que iniciamos el 14 de abril, demostrando a su vez que los que queremos el cambio, la paz, el progreso, la justicia y el reencuentro de los venezolanos, desde hace mucho tiempo somos mayoría.      
Que nada te detenga el 8 de diciembre. Venezuela y Maracaibo esperan por tu voto, el de tu familia y el de tus amigos, para continuar la lucha por el cambio que se avecina y que traerá cosas buenas para todos. No botemos la oportunidad de oro que nos ofrece el 8 de diciembre para ganar y abrazar un mejor porvenir. Si votas, todos ganamos.


Publicado en Versión Final el 29 de noviembre de 2013